Trasglose y Despaso

Hay compañeros, como mi buen amigo Marcos, que sin ser disléxicos, al Traspaso y Desglose le llaman de una manera un tanto especial Trasglose y Despaso. No es difícil escuchar en un turno de un día cualquiera decir aquello de ¿Ya habéis hecho el Trasglose y el Despaso?.

Es una forma de romper la dinámica del trabajo y sacar una sonrisa a más de uno en el Centro. Es lo que se llama crear un buen ambiente puntual y de una manera espontánea. Pero no todos los días son iguales, hay muchos días en el que el Traspaso y el Desglose no deja de ser una pura tarea rutinaria que empieza y acaba con la correcta asignación de los mostradores de facturación de los días siguientes.

Seguramente sea una de las funciones que menos interés pueda suscitar en un Centro de Operaciones, pero no por ello deja de tener su alta importancia y aunque casi nunca genera problemas, siempre y cuando la programación que se haya realizado previamente haya sido la correcta, también es verdad que si no lo fuera, toca correr para encontrar una solución lo antes posible y evitar un auténtico caos en las baterías de facturación de las terminales de los aeropuertos.

El Traspaso y Desglose es una tarea casi tan rutinaria como puede llegar a ser la asignación del SATE (Servicio Automático de Tratamiento de Equipajes), pero del SATE ya hablaremos otro día.

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