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Carta a los Reyes Magos
Palma de Mallorca, 3 de enero de 2015. Queridos Ángel Luis, José Manuel y Javier, majestades de Enaire y Aena, venidos de Oriente y del más allá. Antes de nada, deciros que vuestros empleados se han portado muy bien este año pasado y que gracias a ellos, no os olvidéis, habéis podido gestionar más de 200 millones de pasajeros, todo un record que os habrá llenado vuestras viejas arcas de oro, incienso y mirra, de pingües beneficios.
Y como de buen nacido es ser agradecido, creo que deberíais empezar a pensar en subirles el sueldo, y no os abriguéis en la sempiterna excusa de que estamos sujetos al erario, porque eso, estimadas majestades, ya no cuela.
¿Y qué tal empezar a generar empleo estable, de calidad y con una buena formación reconocida, olvidándose de la precariedad laboral y formativa?, y ya que estamos, y puestos a pedir, ¿Porqué no rebajar el listón exigido del 10% de representatividad en las elecciones sindicales, para dar la oportunidad a otros sindicatos (otras voces y otras razones) a entrar en la Coordinadora Sindical Estatal, y que no estén siempre los mismos negociando y conspirando con vuestras majestades?.
Asimismo, os agradeceríamos que revisarais la estructura que tenéis por vuestros centros y cambiarais a unos cuantos y cuantas, pajes y lacayas, que no es que no den la talla, sino que no se enteran de que va la vaina.
También recordaros que ya que estamos en el IBEX35, podríamos retomar aquellas viejas tradiciones, tan nuestras en otras épocas, de regalar algún presente a vuestros empleados por Navidad, y donarles las comidas y las cenas al personal de turno en tan señalados días como son la Nochebuena y la Navidad, y la Nochevieja y el Año Nuevo. ¿Qué dispendio os costaría al lado de tener a un personal agradecido?.
Aunque a fuerza de ser sinceros, cabe recordar que su majestad Ángel Luís sí se ha acordado de sus empleados por Navidad, pero que tanto tú José Manuel, como tú negro Javier, no es que os hayáis olvidado, sino que vuestros pajes, han dado órdenes expresas de que no se pagaran comidas ni cenas a vuestros empleados en tan señaladas fechas, seguramente, queremos creer, sin vuestro conocimiento.
Esperemos que estos errores los podáis enmendar en un futuro, no sea que otros compañeros del IBEX35 os llamen tacaños y agarrados a la hora de enterarse de cómo tratáis a vuestros empleados.
Para terminar, y ya que ahora vais camino hacia Belén, os pediríamos que les dierais recuerdos de nuestra parte a San Mariano y a la Virgen Ana María, mentores de nuestra privatización, y les dijerais, ahora que ya termina la Navidad, que les echaremos mucho de menos.
Y a vosotros también.
Atentamente, SICA.
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